Menuda patraña nos quieren implantar de aqui a unos años...
La marca de Tokio, cuando da un paso hacia delante,
es porque está muy segura de que lo que ha desarrollado funciona. El
EV-neo es el primer scooter eléctrico de la marca y en su primera
incursión ha decidido ser cauto y ofrecer honestamente un producto
sencillo pero que garantiza que funcionará, como es habitual.
Tras ponerlo de largo en el último salón de Tokio......bla bla bla....
Este scooter eléctrico tendrá dos versiones, el estándar y el EV-neo
Pro, equipado con una parrilla trasera y un transportín delantero
portaobjetos, capaces de cargar hasta 30 kilos. O sea que no puedes llevar pasajero "normal"
La estructura del scooter descansa sobre un chasis tubular de acero
de cuna abierta, de plataforma plana, con llantas de 12 pulgadas, frenos
de tambor -con CBS- y suspensiones sencillas. El motor eléctrico sin
escobillas -desarrollado por Honda- va ubicado en un cárter basculante,
concéntrico a la rueda trasera -no está en el interior de la rueda- y
externamente no difiere mucho del cárter de un Honda Passion, por
ejemplo. Así parece que estamos ante un scooter convencional.
Detalles
La estructura del scooter es muy básica,
sin extras alucinantes ni hi-tech, ni chorradas inútiles. En Honda van
por faena. La instrumentación es una pequeña pantalla LCD, los
interruptores son similares a los de un Scoopy, los plásticos son
escuetos pero resistentes, los acabados son excelentes… Es un scooter
muy funcional y robusto en el que el diseño, las virguerías y lo
superfluo se han dejado aparte. Eso sí, han dedicado mucho más esfuerzo y
dinero -en calidad de componentes y diseño de funcionamiento- en
baterías, cargadores, circuitería y todo lo que no está a la vista. Y es
que el principal problema de los vehículos eléctricos es el
sobrecalentamiento del motor eléctrico y de las baterías -y su
expectativa de vida-, tanto en uso como a la hora de la recarga. El pack
de baterías de iones de litio -unas SCiB de Toshiba, derivadas del
automóvil Honda Insight- se ha diseñado para que reciba un flujo
constante de aire para evitar el exceso de calor; para asegurar una
temperatura estable incorporan un ventilador. La gran mayoría de ellas
se sitúan en la plataforma plana, para bajar el centro de gravedad al
máximo, aunque en marcha su peso se nota ligeramente. Las cifras del
EV-neo no son impresionantes pero sí correctas: 106 kilos de peso, una
potencia de 3,8 CV, un par motor de 1,1 kgm y una autonomía de 34
kilómetros a una velocidad de 30 km/h -medidos en llano. Con esto llegaremos muy lejos!!!
Para recargarlo existen dos modos: con el cargador estándar
-portátil, situado bajo el asiento, se tardan 3,5 horas en cargar las
baterías al 100 %- o con un cargador rápido de 200 V -se vende aparte-
con el que se recarga al completo en solamente 30 minutos. Hablando de
recarga, el EV-neo tiene el enchufe situado en un lateral, bajo la tapa
verde triangular, y su estructura ha sido diseñada para que sea
resistente y duradero y, a la vez, robusto pero fácil de enchufar y
desenchufar.
En marcha
Tras la pertinente presentación
estática llegó el momento de la prueba. Como en cualquier otro
eléctrico, el arranque es simple; le das a la llave de contacto y ya
puedes dar gas. Los 106 kilos en seco se mueven con facilidad, pero, al
estar concentrados muy abajo -por las baterías-, hay ciertas inercias a
las que te acostumbras rápido. Sorprende la capacidad de aceleración, ya
que alcanza su velocidad máxima casi al instante. De hecho, Honda ha
puesto especial hincapié en que el EV-neo arranque sin problemas
fácilmente en una pendiente de 12º totalmente cargado -con piloto y 30
kilos-. Cuando llega a su velocidad máxima, se estanca y se mantiene
indefinidamente sin problemas, ruidos o vibraciones. Es todo suavidad y
silencio. Tan silencioso es que, como accesorio opcional, venden un
avisador acústico para alertar a los peatones de su presencia -el
Ministerio de Transportes japonés ha elaborado una nueva normativa de
seguridad al respecto. Esto es importante para los tranvías sería necesario (veremos aqui en Zaragoza qué pasa con el puñetero tranvía).
Para frenar, los dos pequeños tambores con sistema Combined Brake
System -la maneta de freno trasero acciona ambos- se bastan para detener
los 106 kg lanzados a 30 km/h, unos discos quizás hubiesen frenado
hasta demasiado. La posición de conducción es correcta y la plataforma
plana facilita mucho el acceso. El asiento situado a 716 mm de altura
del suelo es bajo, muy accesible a cualquier piloto.
El EV-neo es el primer scooter eléctrico de Honda que se pone a la
venta, aunque de momento sólo en Japón -no han indicado si llegará a
Europa-. Es más que probable que, a medida que la tecnología avance, en
Honda desarrollarán scooters de mayores prestaciones, a la par de los
125 cc de gasolina. El futuro para Honda parece tener a la electricidad
como protagonista…
Por: Kohei Ichimoto (desde Japón)
En fin....menuda basura, y luego piensa en buscar sitios de recarga pública, dejando la moto a la intemperie, ladrones, etc...